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Es una técnica para producir abono natural que ayuda a mantener la tierra de los jardines en las mejores condiciones.
Este fertilizante casero aumenta los nutrientes y los minerales de la tierra permitiendo que nuestras plantas crezcan saludables, resistentes y en las mejores condiciones.
Se realiza un proceso de descomposición controlada de las materias orgánicas que resulta de muchas de las preparaciones culinarias de nuestro hogar, entre ellas se destacan las frutas, vegetales, cáscaras de huevo, pedazos de madera, tierra etc…
El compostaje se puede hacer de modo casero, sencillo y a bajo costo. Anímate a empezar esta buena costumbre y empieza a aprovechar todo lo que tiramos a la basura.
Uno de los múltiples beneficios que tiene esta práctica, es que es una forma de hacernos responsables de nuestros propios desechos, que tantos problemas está ocasionando en los rellenos sanitarios ya que, al mezclarse con otros residuos, se echan a perder sin posibilidad de utilizarse en esta bella práctica.
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Cajas de cartón, madera, baldes o bolsas reutilizadas y macetas son buenos recipientes.
Una buena opción es poner a tu disposición más propiamente en la cocina, un pequeño tarro, allí puedes poner los restos orgánicos de tus preparaciones y después transportarlos a la compostera.
Te recomendamos tener el siguiente orden, así mantendrás un equilibrio y una descomposición mucho más rápida, en la base es ideal los materiales secos como ramas, hojas secas, cortezas y materiales leñosos, luego siguen las materias orgánicas que vas a empezar a almacenar, continúas con restos de poda como ramas, flores, hojas o pasto y finalizas con tierra de huerto, lombrices y estiércol si dispones de ello.
Recuerda que el recipiente en dónde vayas a tener tu abono orgánico debe ser como mínimo de 20 litros de capacidad.
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Estos pequeños animalitos son excepcionales, se encargan de comer los restos orgánicos y de convertirlos en rico humus.
Cuando hablamos de ‘humus de lombriz’ nos referimos al estiércol de la lombriz, tiene los nutrientes de las frutas y verduras junto a otras propiedades muy buenas para las plantas.
No solo ayuda a enriquecer el compostaje, sino que también acelera el proceso de descomposición, las lombrices son ideales, pero de igual manera, te aclaramos que no es absolutamente necesario tener lombrices.
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Cuanto más finos los restos, más rápida la descomposición
Te recomendamos cortar los residuos porque esta pequeña práctica ayudará a romper materiales resistentes como pieles y cáscaras, también permite que los microbios, incluidas las bacterias y los hongos, accedan a más material orgánico en los desechos y eventualmente los descompongan más rápido.
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Si lo que te preocupa son los malos olores y mosquitos, solo debes tener las precauciones necesarias para que no sea una molestia.
Nuestro compost nunca debe oler mal, si esto ocurre es a causa de un déficit de oxígeno o demasiada humedad, por ello te recomendamos tenerlo en un área con buena circulación de aire y que no le caiga lluvia directamente, para permitir que entre oxígeno a la mezcla revuélvela con un rastrillo o pala una o dos veces por semana, de igual forma te ayudará a que las moscas o mosquitos no tengan acceso completo a estos elementos frescos.
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